A muchos de nosotros y de nosotras nos habrá pasado que, de repente, la llave que abría el candado de la bicicleta que tenemos aparcada y amarrada a una farola nos ha desaparecido. ¿Ahora qué? Porque morder la cadena no podemos, tampoco tirar de ella, y todo lo que hagamos será imposible.
Así que mejor aprendemos un truco para abrir un candado sin llave pero, eso sí, un truco para usarlo responsablemente, no vayamos ahora a convertirnos en profesionales de guante blanco.