Es posible que tengas en casa una cubertería especial para ocasiones especiales, esa que no pones a diario y que sólo usas para ocasiones en las que hay que lucirse, bien porque es especial, o porque quieres conservarla.
Por norma general ese tipo de cuberterías son de plata lo que hace que, con el paso del tiempo, se pongan ennegrecidas y tengas que sacarlas unos días antes para limpiarlas y que estén relucientes para ese día concreto.
Pero si lo que quieres es que no se ennegrezca y así puedas acabar con los preparativos antes, te recomiendo dos trucos: el primero, guardarla en un lugar sin luz. El segundo, guardar cada uno de los cubiertos por separado y envueltos en papel de seda o tela de fieltro. Esto evitará que se pongan negros.