Cuando vemos unas manos con uñas pintadas y piel suave, seguramente pensamos un par de cosas: la primera es que a nosotras también nos gustaría lucirlas bien cuidadas, y la segunda es que mejor nos quedamos así, pues asumimos que consume tiempo, esfuerzo y dinero llevarlas de esa forma.
Claro que hay que esforzarse un poco, pero implica menos de lo que se piensa. Te damos algunos tips para lograrlo en minutos:
1. Hidrata las cutículas: Pese a lo que la tradición dicta, no es necesario que las cortes. Basta con que las empujes hacia abajo con un palito de madera de naranjo y les apliques aceite cuando lleguen a resecarse.
2. Mantén la forma: Mientras más definida sea la forma de tus uñas, más pulcras se verán. Lo mejor es no llevarlas demasiado largas. Límalas cuadradas o con forma ovalada.
3. Finge una manicura francesa: El estilo más pulcro y elegante puede fingirse sin problemas. Usa una capa de barniz transparente, (ésta no revelará un aspecto descuidado cuando comienza a desprenderse) y pasa por debajo de la uña la punta de un lápiz blanco repetidas veces. Los hay especialmente para este estilo, aunque también puedes usar un simple color de cera.
Es un pequeño cambio, pero notarás con agrado la diferencia.