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3. Las bragas deben ofrecer, ante todo, seguridad y comodidad: No tienes que gastar una fortuna, pues lo ideal es que las reemplaces más seguido que a los sostenes. Sigue aumenta la cantidad, pero sigue el mismo criterio que con éstos en cuanto a color y forma, según las ropa que uses.
4. Ojo con las tallas: no te vayas con la impresión de un número, mejor calcula el tamaño de la prenda, la flexibilidad de broches y de tela. Huye de la ropa interior apretada y de aquella que se note incluso con la ropa de calle puesta.
5. Trátalas con cuidado: Lava las prendas según las instrucciones que te proporcione la etiqueta. Hay muchas bolsas especiales para ropa delicada disponibles en el mercado, no dudes en darle buen uso, lo mismo con los detergentes para ropa delicada. Así te durarán mucho tiempo y no gastarás mucho dinero.
6. Guárdala con astucia y coquetería: procura mantener separados los sostenes de las bragas. Los primeros deben conservar la forma de la copa, fíjate cómo los doblan en las tiendas departamentales e imita el método en los cajones de tu propia casa. Invierte en bolsitas aromáticas para mantenerlas siempre frescas y con un aroma agradable.
