Ahora que ha llegado el buen tiempo es lógico que nuestros perros y gatos comiencen a sufrir el ataque de garrapatas, unos bichitos bastante feos y que pueden hacerle mucho daño al animal (porque lo que hacen son succionarle la sangre e inyectarle un poco de veneno).
Los bichos que puede tener pueden ser de diferente tamaño, desde pequeñitos (que son negros) a grandes (que son marrones). Por supuesto, hay que quitárselos todos y la única manera es arrancándolos, pero no de cualquier modo.
Lo primero que haremos será tranquilizar al perro o gato. Ahora cogemos un algodón o servilleta empapada en alcohol y la ponemos encima de la garrapata. Por instinto la garrapata comenzará a ahogarse así que soltará un poco la herida que le ha hecho al perro (eso en unos segundos) y será cuando nosotros podamos arrancarlo sin problemas.
¿Cómo saber si lo ha soltado? Bueno, siempre se espera un tiempo prudencial y se tira, no sabremos si lo ha soltado porque en realidad no lo vemos pero sí lo sabras si te cuesta arrancar el bicho o no.
Mi recomendación, para evitar que tenga más garrapatas cómprale unas pipetas para tal fin, son lo mejor (nada de collares ni sprays).
