Esto que queremos mostrarte hoy no es para que lo hagas cuando no debas, por supuesto, sino cuando necesites librarte de las esposas (y creo que ya sabemos a qué nos estamos refiriendo).
Por eso lo único que vas a necesitar va a ser una horquilla de las del pelo y un poco de maña para aprender el truco. Por lo demás, práctica, mucha práctica.