¿Qué le vamos a hacer? Todavía solemos siendo constantes a la hora de hacer la comida y usamos el horno cuando queremos comernos una patata asada que, claro, quema cuando la sacas del horno y nos acabamos quemando los dedos a la hora de comerla.
Pero, ¿y si hacemos algo para abrirla, sacar la patata de la cáscara y no quemarnos? Coge una servilleta y dóblala por la mitad. Ahora coge la patata con esa servilleta y pártela por la mitad.
Coge de nuevo la servilleta y vuelve a doblarla por la mitad. Coge una mitad de la patata con esa servilleta doblada y podrás sacar con la cuchara la patata sin quemarte. Más fácil imposible.