Hay personas a las que les gusta coleccionar sellos y, cuando reciben una carta con un sello bonito, lo recortan o despegan con cuidado para guardarlo junto a los demás. Sin embargo, algunas veces el sello se rompe y nos da mucho coraje porque nos gustaba.
¿Cómo despegar los sellos entonces? Muchos dirían que con vapor porque el pegamento que lleva se funde y así sale pero hay otra forma también. Se trata de meter la carta (sobre y sello) en el frigorífico durante al menos unos 20 minutos. El frío hace que el sello salga fácilmente del sobre y así puedas conservarlo en perfecto estado.