Si tienes parquet en tu casa seguro que en algún momento del año éste empieza a crujir cuando andas por él y, vale, por las mañanas no pasa nada pero, ¿y por las noches? El susto está garantizado si andas por él por lo que siempre es mejor evitar que suene.
Para hacerlo lo mejor es utilizar polvos de talco entre las juntas y huecos. Echale y golpea con tus pies en el suelo para que los polvos entre en el interior. Después solo es cuestión de usar una aspiradora para quitar el resto.
Con esto conseguirás que la madera no suene y podrás tenerla perfecta.