Sin duda esta manualidad llamará la atención de los más pequeños aunque es algo complicada de hacer porque no es fácil encontrar las bolas de corcho para la cabeza (al menos en la época que estamos que es cuando más manualidades se hacen en escuelas infantiles, colegios e institutos).
La manualidad de hoy es sencilla. Tenemos un rollo de papel higiénico gastado, colores, pinturas y algo de tela. Se trata de pintar todo el rollo con un color llamativo. Lo más lógico sería pintarlo en negro con una franja ancha en el medio para que simule el cuerpo de un pingüino.
Una vez pintado nos toca pegarle en uno de los extremos un trozo de tela (si es de lana mejor) simulando una bufanda (es decir, que hay que darle forma). Por último ya sólo nos quedará la cabeza de corcho que hemos de pintar en negro, hacerle los ojos y, con cartulina, crear el pico del animal.
Terminado eso sólo nos queda ponerle dos patas de cartulina y pegarlo en un cartón para darle más consistencia.