En el verano, con el sol, el agua y que maltratamos mucho nuestro pelo, llegamos a hacernos daño de verdad en el mismo y lo notamos más enredado, más seco e incluso que se nos cae más. Por eso quiero dejarte una mascarilla casera que puedes hacer en unos sencillos pasos:
- Coge la fruta madura que tengas en el frigorífico (siempre que sea fruta con poca agua porque si no no saldrá bien la mascarilla). Pélala un poco y bátela.
- Ahora añade aceite de girasol hasta que tengas la textura de una crema.
- Póntela en el pelo unos 10 minutos para que actúe y, después, enjuágate bien el pelo para que no te queden restos (que pueden acabar acudiendo a ti algunos bichitos indeseables).