Muchas personas, quizás entre las que te encuentras, sufren de lumbalgia, un problema de espalda que suele ser doloroso y es debido quizás a las muchas horas que pasamos sentados, a la falta de ejercicio, etc. Este problema, cuando afecta al cuerpo, normalmente en los cambios de estación o con el frío, puede imposibilitar a la persona en sus movimientos.
Para ayudarte a aliviarlos y que además tengas menos dolor y problemas para seguir con tu vida normal, puedo darte un par de remedios que suelen funcionar. No es que vayas a lograr desaparecer los problemas (porque no hacen milagros) pero al menos vas a aliviar los dolores que ya de por sí es mucho.
El primero de los remedios es el de calentar dos cucharas grandes de sal gruesa. Has de removerlo bien para que no se pegue con una cuchara de manera y cuando esté ya caliente has de meter eso en un saco de tela, una especie de bolsa que has de colocar justo en la zona donde sientas más dolor. Te digo que reducirás esos dolores bastante (por la aplicación de calor en la zona y por el uso de la sal).
Otro remedio muy usado también es el de hervir patatas (como si fueras a hacer patatas cocidas), pelarlas y machacarlas formando una pasta. Si eres de los fuertes lo mejor sería aplicar esa pasta directamente en la zona pero, si no, puedes poner un paño entre medias y tapar bien la patata para aplicarlo en la zona.
Eso sí, en ambos casos has de estar relajada así que ve olvidándote de estar pendiente de otras cosas o de moverte durante al menos 10-20 minutos porque necesitas ese descanso (aunque te duermas en el proceso).
Esto puedes aplicártelo siempre que te duela, no llega a ser malo aunque, si lo haces mucho, tu cuerpo se acostumbra.
