Hay mujeres, y también hombres, que suelen tener ojeras o bolsas en la parte inferior de los ojos que hace que su aspecto parezca el de una persona que no ha dormido mucho, o ha trasnochado, cuando a lo mejor la realidad no es así.
Tratamientos quirúrgicos para esto hay muchos, es cierto, pero yo siempre abogo por los tratamientos caseros ya que pueden darte soluciones y no provocar reacciones negativas en tu cuerpo (o consecuencias que después afeen más el aspecto que tienes).
Uno de los tratamientos es el de usar té negro o diente de león (incluso las dos juntas) en una infusión. Lo que has de hacer es hervir las dos hierbas juntas durante unos minutos y después dejar enfriar. Has de coger algodón o gasas y empaparlas una vez esté bastante fría (si quieres, una vez se temple puedes meterlo en el frigorífico para que se enfríe) de tal forma que coloques las gasas en las bolsas y ojeras para que éstas disminuyan.
Por supuesto, este remedio no te las va a eliminar, son parte de ti, pero sí puede difuminarlas, o hacerlas menos evidentes. Después con un poco de maquillaje puedes conseguir que desaparezcan.
También puede resultarte efecto aplicarte hielo en esa parte de la cara el problema es que, cuando el frío abandona la cara, y pasa un tiempo, las ojeras y bolsas vuelven a aparecer de nuevo sin que puedas hacer nada al respecto.
Este tratamiento puedes aplicártelo dos o tres veces al día pero sobre todo que una de las veces sea por la noche antes de dormir. Así conseguirás que las ojeras y bolsas puedan verse disminuidas un poco. Por ejemplo, puedes aplicarlo nada más levantarte, al mediodía (si tienes tiempo libre) y por la noche antes de acostarte.
