A menudo, por tal de entretener a los niños, de mantenerlos, no ya callados sino quizás ocupados en algo que no sea ver la televisión, jugar a los videojuegos, o estar tumbados en el sofá, se suelen buscar manualidades que sean rápidas de hacer y de disfrutar con ellos, más si están en la etapa de los juegos de rol, es decir, aquellos en los que fingen ser otro personaje y se inventan sus propias aventuras.
En este caso vas a ayudarle enseñándole a crear un sombrero con solo cartulina. A decir verdad se pueden crear muchos tipos de sombrero. El primero que me ha venido a la cabeza ha sido un sombrero de vaquero. Para ello tendrías que cortar un círculo más grande que la cabeza del niño, para que tenga solapas, y después una tira ancha que hará la función de darle grosor. Recuerda que el círculo debe llevar un agujero en el medio para meter la cabeza del niño.
Para sujetar la tira ancha (que has de enrollarla alrededor del círculo) puedes usar grapas, celo, etc. También has de cortar un círculo más pequeño para tapar la parte de arriba de esa tira y sobre todo darle un aire de usado (arrugando la cartulina, pintándola con pintura de varios colores, etc.
Hay otra variedad de sombrero, por ejemplo los sombreros de copa, más elegantes y para fiestas o para cuando quieren representar otro tipo de fantasía. Éste se basa principalmente en que la tira ancha es mucho más ancha y no has de arrugar la cartulina ya que este tipo de sombreros debía estar siempre impecable.
Los sombreros no son de los que duren mucho, menos cuando juegan los niños, pero seguro que se pasa un rato divertido haciéndolos, y puede ser un rato en familia que muchos agradecerán.