Por las mañanas es necesario salir de casa lo mejor nutridos posible, pero la verdad es que a veces no hay tiempo ni apetito para un desayuno abundante y perfectamente balanceado. Sin embargo, con un par de ingredientes clave podemos hacer un verdadero desayuno para todos los miembros de la familia, pues es bajo en calorías, proporciona energía y sabe delicioso. Lo mejor: estará listo en sólo unos minutos.
Ingredientes por porción
-Un vaso de leche desnatada
-Dos cucharadas de avena cruda
-Una cucharada de miel
Mezcla todos los ingredientes licuándolos aproximadamente durante veinte segundos o hasta que la avena se disuelva casi por completo. Sirve y consume de inmediato para que no se asiente ni se espese.
La avena proporciona energía y fibra, la leche, calcio, proteínas, la miel te ayudará a despertar y arrancar el día con entusiasmo. También puedes incluir una porción de frutas como fresas, manzana, zarzamoras, o quizá un puñado de almendras o nueces en la mezcla, si es que no desean tomarlas aparte de una a una. Si deseas un sabor más intenso, añade unas gotas de esencia de vainilla. El batido produce una sensación de saciedad que durará hasta media mañana, así que ¡a disfrutar!