Una de las muchas desventajas de la vida acelerada que llevamos en nuestros días es que resulta muy difícil mantener una alimentación equilibrada, natural y elaborada en casa, con sus cada vez más conocidas consecuencias en nuestro ánimo, nuestra salud y rendimiento. Sin embargo, podemos contrarrestar estos efectos simplificando el proceso de elaborar un desayuno práctico, excelente para el bienestar de mente y cuerpo.
El batido de yogurt y frutas es una excelente opción para comenzar el día, y no es necesario que nos levantemos de la cama antes para lavar, cortar y licuar la fruta, ni que perdamos valioso tiempo limpiando aquello que utilizamos antes de salir. Simplemente, cambiemos la jugada: hagamos el batido la noche anterior y guardémoslo en la nevera, así no perderá sus propiedades y a la mañana siguiente estará listo para llevar. La mejor opción para elaborarlo son los frutos rojos: las fresas, zarzamoras, moras o arándanos, pues no contienen grandes cantidades de azúcar y sí mucho sabor. Proveen antioxidantes, que optimizan nuestra energía y atención.
Para el verano, el mismo batido puede colocarse en moldes de paleta de hielo, ponerles un palito de madera y listo: a la mañana siguiente, tendremos un desayuno saludable y una deliciosa golosina portátil al mismo tiempo.