Si te apetece sorprender y sorprenderte con un poco de cocina exótica, prepara un curry para disfrutar de un nuevo e insólito sabor.
1. Todo bien seco
Deja secar porciones similares de comino, cilantro e hinojo. El curry (ahora lo sabes) es el nombre del recipiente en que se secan al fuego estas especies, pero cualquier sarten de buena calidad te vendrá bien. O, si quieres apurar el proceso, el horno de microondas
2. Muele todo
Usando un mortero, una vez que las especies resacas están frías, muele todo. El sabor del curry proviene en buena medida de su preparación, de modo que si usas algún implemento moderno para ahorrarte trabajo en esta etapa, va por tu cuenta y riesgo. Empieza por los tallos más duros, y luego los más suaves. ¿Cómo saber si lo estás haciendo bien? Si huele bien, vas por buen camino.
3. Marina la carne
El curry suele ir bien con cualquier tipo de carne, aunque es especialmente indicado con el pollo. Deja que la carne se marine toda una noche en tu mezcla de hierbas. Si tienes prisa, con una hora y media es suficiente.
4. Al dente
El secreto del buen curry es su preparación al dente: ni más ni menos. Este punto suele apreciarse gracias a un color dorado y un aroma intenso. Entonces añade la carne marinada, y leche de coco 8o yogur) hasta cubrir bien todos los trozos. Una cocción lenta es lo idea hasta que la carne esté bien cocida.
Fuente | How to do things
